Todo funciona por carriles, todo funciona por impulsos, por actitudes y aunque joda, por intereses. Por eso, destras de una imperturbable fachada escribo esta noche.
Quizás sea por un carril, probablemente por un impulso, seguramente por actitud, pero no por interés. Aún así por una noche este blog será, con su permiso, estremadamente escueto y bipartidista; como siempre lo fue.
Más no se librará el lector del correspondiente mongólogo cargado de de irónica ironía y de pseudomaneras de vivir. Que tal vez fueron menospreciadas, tal vez apalabradas, encauzadas y marcadas, pero nunca rechazadas, ni mucho menos olvidadas.
sábado, 20 de junio de 2009
domingo, 14 de junio de 2009
Cinéfilos
Pues sí, hay una nueva entrada en el blog. Probablemente parezca extraño dado el largo periodo de inactividad del mismo, pero ya tenía ganas de escribir. Y ahora toca aplicar una solución desmesurada ante un problema nímio puesto que durante este tiempo me he estado documentando sobre un aspecto importante de la vida que es el cine. He estado viendo multitud de películas en este tiempo y he de decir que son realmente interesantes y me han llevado a conclusiones mas interesantes todavía.
Algo importante a la hora de ir al cine es no equivocarse de pelicula y acabar viendo "Batman", "Idiocracia" o alguna españolá como "Fuera de carta". Que no significa que no sean buenas peliculas, solo que quizás sea mas rentable alqilarla o fumarse un porro glorioso para poder aguantarla.
Otras veces es mejor coger carretera y tu mejor manta para irte de aventura y acabar lejos de los cines, en algún pueblo perdido rodeado de vacas y de algún que otro perro siniestro. Pero no te confies que siempre puede haber miles de miles de millones de televisores donde pongan alguna pelicula poco apropiada como "V de Vendetta", "El golpe" o "Cinco semanas en globo" (versión leída para ciegos del libro de Julio Verne).
Si acabas odiando el cine y solo quieres evadirte lo mejor es rodearte de hippies. En este ambiente quizas no te encuentres muy comodo puesto que no hay lujos como foskitos o buena musica. Dado que no hay relojes es difícil llegar a tiempo, ya sea al taller de manualidades o a pillar sitio en la tienda de campaña para no dormir hacinado.
Pero como todo va por épocas, pueder ser que del odio pases a la adoración del séptimo arte y acabes rodeado de frikis japoneses que parecían normarles al principio, pero siempre hubo algun disidente en el grupo quizás no tan friki a quien acercarte. Aun con su ayuda e incluso con la de Jesucristo guiandote por el camino correcto (aunque él mismo no tenga ni idea) puede que acabes huyendo en la bicicleta hippie, que aun tienes.
Quizás no sea un viaje muy extenso pero al final, tras algunas peleas de gallos, otros viajes a Portugal, intensas noches toledanas, otras de abridores y peñas flamencas, pasajes cerca del cherero y otras muchas experiencias puede ser que termines sabiendo lo mismo de cine que al principio. Pero seguro que has aprendido muchas otras cosas. Por eso me rindo a la evidencia, aunque escape de mis formas, solo me queda mostrar: confianza y respeto.
Algo importante a la hora de ir al cine es no equivocarse de pelicula y acabar viendo "Batman", "Idiocracia" o alguna españolá como "Fuera de carta". Que no significa que no sean buenas peliculas, solo que quizás sea mas rentable alqilarla o fumarse un porro glorioso para poder aguantarla.
Otras veces es mejor coger carretera y tu mejor manta para irte de aventura y acabar lejos de los cines, en algún pueblo perdido rodeado de vacas y de algún que otro perro siniestro. Pero no te confies que siempre puede haber miles de miles de millones de televisores donde pongan alguna pelicula poco apropiada como "V de Vendetta", "El golpe" o "Cinco semanas en globo" (versión leída para ciegos del libro de Julio Verne).
Si acabas odiando el cine y solo quieres evadirte lo mejor es rodearte de hippies. En este ambiente quizas no te encuentres muy comodo puesto que no hay lujos como foskitos o buena musica. Dado que no hay relojes es difícil llegar a tiempo, ya sea al taller de manualidades o a pillar sitio en la tienda de campaña para no dormir hacinado.
Pero como todo va por épocas, pueder ser que del odio pases a la adoración del séptimo arte y acabes rodeado de frikis japoneses que parecían normarles al principio, pero siempre hubo algun disidente en el grupo quizás no tan friki a quien acercarte. Aun con su ayuda e incluso con la de Jesucristo guiandote por el camino correcto (aunque él mismo no tenga ni idea) puede que acabes huyendo en la bicicleta hippie, que aun tienes.
Quizás no sea un viaje muy extenso pero al final, tras algunas peleas de gallos, otros viajes a Portugal, intensas noches toledanas, otras de abridores y peñas flamencas, pasajes cerca del cherero y otras muchas experiencias puede ser que termines sabiendo lo mismo de cine que al principio. Pero seguro que has aprendido muchas otras cosas. Por eso me rindo a la evidencia, aunque escape de mis formas, solo me queda mostrar: confianza y respeto.
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